21 nov 2012

Ni un minuto




     Ya he visto , en algún que otro comercio de Vitoria , los adornos de la navidad. Lo cierto es que tres son los momentos en los que esta ciudad cambia de color sus calles: en Navidad, en Carnaval y en la Fiesta de la Virgen Blanca..; pero durante el resto de los días,  se mantiene ese tono gris que se rompe de vez en cuando con notas de color .

   Hoy me he fijado en Maria, una mujer de unos 75 años, que  salia de un ultramarinos con una bolsa de plástico donde sobresalía una botella de champan. Tiene un ritmo lento en su caminar pero su cara transmite felicidad, algo raro ver en estos días .









3 nov 2012

Recetas








  




     Hoy , mientras volvía andando a Lakua desde el barrio de Zaramaga , vi la puerta abierta del cementerio de Santa Isabel. Tengo la posibilidad de atajar por el cementerio y llegar antes a mi casa , pero no niego que me daba algo de “yuyu

    Al final decido entrar y mientras caminaba rápidamente entre las tumbas, una señora mayor, y con un gesto, me pide que me acerque donde ella. Le hago caso y me acerco.La señora  me pide que le ayude a colocar un gran ramo de flores en la tumba de su marido. Cuando acabamos de colocar el ramo, y antes de irme, la señora mayor me dice:

-Perdona, no quiero molestarte, pero tengo una pregunta que mi marido solía hacerme de vez en cuando- mientras me cogía suavemente del brazo.

-Pues… pregunte, no es molestia ninguna- le conteste con cierta curiosidad.

  -¿Cuál es tu receta para ser feliz? me pregunta la señora mientras cogía una flor.
.
   La verdad es que no supe que contestarle. Me dejó sin palabras.No dije nada.

   Me soltó el brazo, y con un paso lento, empezó a andar hacia la puerta de salida por la que yo antes había entrado. Me quede allí plantado como un tonto mirándola como se marchaba del cementerio. 

Tras dos minutos sin moverme de allí, sentí miedo pero no sé si por el silencio que había en ese lugar o porque no conocía los ingredientes de la receta para ser feliz