Aún sigo impactado por esa foto que he visto esta mañana en un periódico. Desconozco la historia de la niña fotografiada, la del fotógrafo, la de la agencia que la distribuye, la del medio que la publica y la de muchos lectores que la interpretan. Solo sé que esa fotografía está cargada de una multiplicidad de miradas.
No sé pero al ver la fotografía me ha suscitado tres preguntas que siguen rondando en mi cabeza: ¿Se puede informar de un hecho y permanecer pasivo ante la tragedia? ¿la libertad del que emite o recoge esa imagen se confronta con los derechos de las víctimas? y ¿cuantas veces hemos aplaudido?
"La vida es muy peligrosa.
No por las personas que hacen el mal, sino por las que se sientan a ver lo que pasa."
( Albert Eisnten)